LA ISLA DE LOST
Hay momentos en los que necesito aislarme.
No hablar.
No hacer.
No.
hay días en donde me veo superada por ciertas situaciones, donde tengo esa sensacion de que las cosas se me van de las manos, que pierdo el control y no se como ni por donde seguir... Son esos momentos donde necesito parar, Hacer una pausa, bajarme del mundo para acomodar mis ideas, para renovar energías y seguir caminando.
Soy extremista. Lo se.
Paso de ser un ser completamente social, extrovertido... a encerrarme en una isla completamente hermética, inaccesible, ermitaña.
A veces me hace muy mal y me pone muy triste sentirme sola. Hay otros momentos donde pido a gritos mi soledad...
Para saber en donde estoy parada... que es lo que quiero y necesito...
Para repensarme, organizar mis ideas y emociones...
Para entender porque me sucede lo que vivo, y como voy a seguir...
Mi psicólogo me dice que estos extremos que transito no son buenos, que tengo que construir el medio, que los grises no son tan feos...
Ayer decidí recluirme en mi guarida. Un poco por protección, un poco por incertidumbre... otro tanto por tristeza...
Estos momentos me son necesarios... y esta vez, mi objetivo será aprender a mezclar el blanco y el negro para ver que sale de ese gris que tanto me disgusta y hasta me asusta un poco transitar...
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